El regreso progresivo a las aulas será opcional y de acuerdo con un plan de cada institución educativa, según el ministerio del ramo. Las escuelas y colegios del país tienen hasta mañana para presentar sus planes de continuidad educativa que implicarán un retorno a las clases presenciales de manera opcional y paulatina.
Cada establecimiento debe definir el número de estudiantes que podrá albergar de manera presencial según su infraestructura y los días específicos, dependiendo de la capacidad que tengan de cumplir con las medidas de bioseguridad para prevenir contagios de COVID-19. Esto es parte de la modalidad mixta que se aplicará durante el próximo año lectivo del régimen Costa y lo que queda del de la Sierra.
La ministra de Educación, Monserrat Creamer, afirmó a este Diario que en los planes se señala “cómo ellos planifican esta alternancia, cómo van a hacer, cuántos niños van a poder estar en las aulas, cuántas horas van a poder ir los estudiantes por día, obviamente obedeciendo todos los protocolos de autocuidado, cómo están capacitados sus docentes y cómo se va a implementar el currículo”.
El 60% de los padres de familia de los colegios que fueron parte del pilotaje en las zonas urbanas señalaron en encuestas que no desean el retorno a las aulas, según Creamer. Pero en los de las zonas rurales este porcentaje es del 20%.
“A medida que las escuelas fueron entrando en el pilotaje se fue incrementando poco a poco la voluntad de retornar con alternancia a clases, confiando ya en cómo funcionaba el sistema”, asegura Creamer.
Los que no deseen podrán seguir con el programa Aprendamos Juntos en Casa, en el caso de los estudiantes de los establecimientos fiscales, y en las particulares con la modalidad virtual aplicada desde el inicio de la crisis sanitaria.
El Ministerio de Educación se encargará de aprobar cada uno de los planes de las instituciones educativas en mesas interinstitucionales junto con la cartera de Salud.
Las decisiones serán flexibles, asegura Creamer, ya que si sube la curva de contagio del COVID-19 en determinado lugar, se regresará totalmente a la modalidad virtual.
“El COE (Comité de Operaciones de Emergencia) nacional le dio la rectoría y la responsabilidad al Ministerio de Educación para que apruebe todos los planes institucionales sin tener que pasar cada uno de ellos por ese organismo”, precisó Creamer.
Los planes se aplicarán en la región Costa a partir del 7 de mayo próximo cuando se inicie el nuevo ciclo escolar.
“Lo que hace cada unidad educativa es adecuar a sus necesidades de contexto cultural, número de estudiantes, de docentes, circunstancias, infraestructura sanitaria, capacitación, ajustarse a los protocolos de autocuidado, horarios, etcétera, con sus características especiales. Es una firma de responsabilidad de la unidad educativa de que está lista para empezar este proceso de pilotaje y retorno progresivo, seguro y opcional”, indica.
Uno de los retos es que los profesores de cada uno de los establecimientos tendrán que atender y hacer seguimiento a los que decidan ir a la modalidad de alternancia (en las aulas y en casa de manera online) y a los que consideren continuar en la modalidad virtual. En la educación fiscal, 10.000 docentes de un total de 165.183 no reportaron teletrabajo durante los últimos dos meses. A ellos se dispone que al menos una vez a la semana vayan a trabajar al plantel.
“Necesitamos urgente tener información al día, actualizada, de qué está pasando con sus estudiantes y por eso que insistimos en que retornen a sus escuelas por lo menos un día a la semana y también para apoyarlos, cuál es el problema, por qué no están reportando teletrabajo y nos digan cómo sabemos que tienen contacto con los estudiantes si a nosotros no nos reportan lo que hacen”, indica Creamer. (El Universo)