Con los criterios de actores, nacionales e internacionales, involucrados en el tema de la tecnología 5G, el Grupo Parlamentario por el Bienestar Animal, que preside Washington Paredes, profundiza el debate de la posible afectación de la radiación electromagnética a la salud de los seres vivos. Además, en el proyecto de cable submarino para las islas Galápagos y el posible impacto en las especies marinos.
Patricia Falconí, subsecretaria del ministerio de Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información (Mintel), sostuvo que la tecnología 5G busca una mayor adopción de la tecnología de la comunicación e información; acceso al internet; implementación y despliegue de ciudades inteligentes, inclusive, aseguró un ahorro de consumo de energía de hasta el 90 %. Posibilitará que objetos cotidianos, desde la nevera hasta el automóvil, puedan conectarse entre sí en tiempo real, de manera estable y con agilidad, agregó.
Explicó que según un informe del Ministerio de Salud Pública la exposición de energía de radiofrecuencia producida por antenas bases de telefonía es muy baja, incluso más baja que los límites establecidos en guías internacionales.
Aseveró que no existe prueba fehaciente, ni técnica que pueda demostrar que la tecnología 5G ha generado daño a la salud. Argumentó que se apoyan en estudios de la Organización Mundial de la Salud que ha manifestado que la exposición a campos electromagnéticos, no parecen tener consecuencias en la salud. “La exposición de energía de radiofrecuencia producida por antenas bases de telefonía es muy baja, incluso más baja que los límites establecidos en guías internacionales”, apuntó.
Carina Vaca Zeller, médico pediatra, habló del impacto en la salud. Mencionó que el sector más susceptible a las afectaciones que puede generar esta tecnología son las madres gestantes y niños/ jóvenes. Afirmó que la radiación derivada de la tecnología 5G genera tantas sombras magnéticas que las personas no podrán evitar su exposición. Sugirió aprender de la historia que dejó el tabaco para no cometer los mismos errores.
Martha Moncayo, gerente general Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT), informó que el proyecto de cable marino actualmente se encuentra en una etapa de estudios previos y permisos y se prevé su implementación hasta finales de 2021. Los beneficios para la población de Galápagos serán el acceso a internet a menores tarifas; acceso a banda ancha; contribución al desarrollo de nuevos negocios (innovación), educación, servicios.
La CNT brinda una reducción de costos de transmisión, oferta comercial con mejores condiciones y más competitivas; y, factibilidad migración de cobre a fibra.
Sobre las posibles afectaciones en el fondo marino, dijo que existe un impacto bajo en el hábitat y la fauna marina. En el caso de enterramiento del cable, existe un impacto medio. No existe impacto en hábitat de invertebrados. No hay impacto del campo electromagnético en hábitat físico de mamífero marinos, puntualizó.
En el debate, Guillermo Bettocchi, abogado independiente, ex funcionario del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados considera que este tipo de tecnología baja el nivel de respuesta del sistema inmunológico.
Con preguntas participaron, Deborah Rivas, de Uruguay, experta en Análisis de Sistemas de Información (Universidad ORT Uruguay), el biólogo Andy Mercado; y, Teodosio Chávez, de Perú quienes pidieron se considere la atmósfera en su conjunto para que no haya perturbación en la salud, con la aplicación del 5G.
El objetivo es que prevalezca la vida sobre la tecnología, mencionó de su lado el asambleísta Washington Paredes, al señalar que la tecnología es buena pero no se puede arriesgar la vida.