En un año el turismo en Ecuador generó $ 5.586,5 millones, $ 263,4 millones (+4,99%) más que el año inmediato anterior cuando el sector aportó a la economía nacional $ 5.323,1 millones, según cifras de la Dirección de Información Turística y Análisis Económico del Ministerio de Turismo.
Estos son los números que el sector turístico anhelaba en el 2020 y que representaban el 2,4% del producto interno bruto (PIB), pero no se asomó ni de lejos.
Eso es pasado, se trata de estadísticas del 2019 comparadas con el 2018, un periodo que hace un año, antes de la pandemia del COVID-19, dirigentes del sector lo consideraban bajo en relación con otros, y proyectaban un 2020 de crecimiento.
Pero para esas alturas ni el más fatalista de los analistas hubiese previsto que el turismo se iba a desplomar hasta solo generar $ 2.774,6 millones, el 50,6% menos que en el 2019 con una caída de ventas de $ 2.811,9 millones, según cifras oficiales. Los gremios hablan de una pérdida mayor.
La pandemia golpeó fuerte, apenas empezaba la temporada en la Costa, hoteles, restaurantes, agencias y más esperaban el feriado de Semana Santa para redondear la temporada, pero las playas y los restaurantes cerraron, se cancelaron reservaciones en los hoteles, los vuelos también pararon, así como la llegada de turistas; el turismo estaba herido de muerte.
Para Carlos Abad, presidente de la Cámara de Turismo de Santa Elena, el golpe inicial fue “catastrófico” para su provincia.
“Un año ha pasado y la mitad de la temporada alta del 2021 y con la vacuna aún incierta crea aún más incertidumbre en el sector turístico con pérdidas económicas incalculables, pérdidas laborales hasta un 80%, cierre permanente y temporal de muchos establecimientos que hasta ahora no se tiene un censo real”, mencionó Abad, quien cree que regresar a los niveles prepandemia tomará hasta el 2024 o 2025.
Y es que el balance al cumplirse un año de la pandemia es obviamente negativo, con un sector turístico que no levanta cabeza. Holbach Muñeton, presidente de la Federación de Cámaras de Turismo del Ecuador y de la Cámara de Turismo del Guayas, indicó que el sector tuvo una caída de ventas del 58,9% al dejar de vender alrededor de $ 2.822 millones solo de marzo a diciembre del 2020.
Abril y mayo fueron los meses más caóticos con un derrumbe del 81,4% y 76,8%, respectivamente. Mientras que los meses con menos pérdidas fueron octubre (45,2%) y diciembre (44,4%).
Del sector, los más afectados fueron las operaciones, agencias e intermediación con un desplome de ingresos del 80,6%, esto es, $ 545 millones, seguido por los alojamientos con el 67,8% ($ 277 millones), transporte de pasajeros con el 64,7% ($ 1.057,4 millones) y por último el sector de alimentos y bebidas con el 45,5% ($ 942,9 millones).
Además se perdieron entre 50.000 y 70.000 empleos plenos en el sector turístico de las 181.563 plazas directas con las que contaba en el 2019. Y con más de 100 establecimientos cerrados, entre estos más de 70 hoteles cerrados de manera definitiva y 80% de las empresas de turismo en riesgo de cierre definitivo.
Tampoco se aprovechó la cantidad de turistas que se quedó en el país debido a la pandemia, lamentó Muñeton, quien señaló que en el 2019 salieron 1′515.133 turistas de Ecuador, mientras que en el 2020 solo salieron 471.738 (-68,9%).
“Técnicamente quedaron 1 millón de personas que no viajaron y se pudo haber conquistado, eso es un costo que perdieron, no se está viajando en el Ecuador, viajar en el Ecuador sigue siendo caro”, sostuvo Muñeton, quien responsabilizó a la falta de apoyo por parte del Gobierno, al asegurar que los negocios siguen cerrando a marzo del 2021.
Por ejemplo, en el caso de la ocupación hotelera en Azuay, indicó Muñeton, la ocupación en promedio está entre el 4% y el 7% mensual y en el mejor de los casos el 10%. “Los feriados que antes tenían el 80% o 100% ahora son el 40%”, lamentó el dirigente.
En el caso de Guayas, Pedro Iván Serrano, presidente de la Asociación Hotelera del Guayas ( Ahotegu), que integra 23 establecimientos con una oferta de 2.130 habitaciones, indicó que la ocupación de enero del 2020 a febrero del 2021 (12 meses) cerró en 26,39%.
Serrano indicó que en ese periodo se esperaba una ocupación del 68% aproximadamente, lo que significa una disminución de 41,61%, menos de la mitad de cumplimiento y una disminución de ingresos en $ 38 millones solo en alojamiento, que si se suma la disminución con alimentos y bebidas supera los $ 50 millones.
“Esto solo Ahotegu, si se suma el resto de la hotelería, llegaríamos a los $ 80 millones de disminución de ingresos de la hotelería de la ciudad, suma que jamás se recuperará”, advierte el dirigente gremial, quien sin embargo nota síntomas positivos en las últimas semanas sobre todo en el segmento corporativo.
“Poco a poco el mercado ha ido reactivándose, en especial el segmento corporativo que viene en función de trabajo. Ha habido buen apoyo del Municipio, que espero rinda méritos a corto plazo. Este año ya vamos sobre el 35% de ocupación lo cual es un síntoma positivo, en especial porque febrero nos afectó por elecciones y feriado”, analizó Serrano.
Mientras, la Asociación de Hoteles y Hostales de la provincia del Guayas (Ashoprog), también representada por Muñeton, que cuenta con más de 400 agremiados, asegura que cerca de 10.000 personas están al borde de una bancarrota actualmente.
Mientras, Muñeton aseguró que los negocios que han sobrevivido hasta la fecha al impacto de la pandemia lo han hecho a base de capital propio, vendiendo activos y apostando al endeudamiento. “La pandemia nos ha dejado secuelas muy fuertes”, lamentó el dirigente. (El Universo)