Una niña de 12 años, detectada con la nueva variante del COVID-19, se encuentra en estado crítico en una UCI, en un hospital, en Quito. Ella es uno de los dos nuevos casos confirmados con la variante que fue reportada por primera vez en Reino Unido a la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El otro caso se trata de un hombre de 64 años que no tiene relación con el caso de la menor. El paciente ingresó a Ecuador con prueba RT-PCR negativa, el pasado 11 de enero, proveniente de Reino Unido. Y la segunda paciente no registra viajes en los últimos seis meses, se detalló en el informe que dio a conocer ayer el Ministerio de Salud (MSP).
El pasado 11 de enero se confirmó la presencia de esa nueva variante en Ecuador. El paciente estaba en UCI, se recuperó pasó a hospitalización y salió de alta el pasado martes. Y los tres familiares que también dieron positivo para la variante están en condiciones estables.
A la fecha varios familiares de los pacientes presentan síntomas, por lo que permanecen con aislamiento domiciliario y bajo control y vigilancia epidemiológica, informó el ministerio al asegurar que se han activado varias brigadas de salud para levantar el cerco epidemiológico en torno a sus familiares y contactos cercanos.
El informe indicó que el hombre también se encuentra en la UCI en otra casa de salud en la capital.
Médicos explicaron que ante el caso de la niña que no ha viajado denota de que esta nueva variante circula de forma comunitaria no solamente en Quito, sino en muchas ciudades más como Guayaquil debido a su mayor movilización comercial.
El médico intensivista Alberto Campodónico explicó que Guayaquil no se quedaría atrás con este tipo de pacientes, pero no se los está identificando y registrando; sin embargo, la evolución de la enfermedad denota mayor complicación.
“Desde el 20 de diciembre la tasa de mortalidad ha incrementado a nivel de UCI, más de meses anteriores. Otro punto es que esta variante avanza muy rápido, por más que uno le pone toda la medicación, avanza muy rápido, todos los días se suben de hospitalización a UCI, eso considero que es por esta nueva variante”, explicó.
Indicó que la solución es hacer más pruebas de biología molecular a los pacientes para poder tipificarla y continuar con los estudios.
El MSP realiza estudios en conjunto con la Universidad San Francisco de Quito (USFQ) y con la Universidad de Especialidades Espíritu Santo (UEES) para el análisis de genomas del virus. (El Universo)