Diego Maradona ha muerto. El astro del fútbol sufrió una descompensación. La causa, un paro cardiorrespiratorio. Maradona se recuperaba en su casa después de haber sido operado el 3 de noviembre de un edema craneal que se le detectó un día antes cuando había sido internado en una clínica por una descompensación que le había provocado la ingestión de psicofármacos y bebidas alcohólicas. Estaba deshidratado y deprimido.
Allí se quedó internado 8 días, no por complicaciones del posoperatorio, sino por sufrir un cuadro de abstinencia, reveló el médico que lo atendió, Leopoldo Luque.
El campeón del mundo con Argentina en 1986 salió de la clínica Olivos el 11 de noviembre, situada en el suburbio del mismo nombre al norte de Buenos Aires, a bordo de una ambulancia, según imágenes difundidas ese día por la televisión local.
El doctor López confirmó a periodistas que él mismo había firmado el alta médica de la leyenda del fútbol mundial. Y también reveló por qué se lo retuvo al Diego más que a cualquier otro paciente en esa situación.
La operación salió bien, pero el médico informó que Maradona sufrió “un cuadro de abstinencia” debido a “los consumos que tuvo durante toda su vida” y no a uno “puntual”.
Su salud iba a desmejorarse, advirtió su último médico
Luque, encargado de la cirugía, solicitó previamente una opinión de Alfredo Cahe, médico personal del exfutbolista durante tres décadas, hasta el 2007. La mirada de este último resultaba preocupante: “Así, Maradona es inmanejable y va a deteriorarse cada vez más. Hay que tomar el toro por las astas y ponernos firmes”, le dijo.
“Ahora lo tenemos sedado. Uno ya tiene experiencia de tantos años anteriores, y sabemos todos los pasos que hay que transitar. Él (Maradona) quiere irse de la clínica. En cuanto toma lucidez total y le bajamos la medicación quiere irse”, aseguró en declaraciones al diario La Nación el especialista que llevó a Maradona a Cuba a comienzos del milenio para que tratara su adicción a las drogas.
"Por eso no quisimos dejarlo ir", reveló entonces el doctor Luque a los medios. Y continuó: “La abstinencia se debe al consumo de toda su vida. Vemos una reacción de sudoración, de ira, y la catalogamos como abstinencia".
Diego no estaba de acuerdo con pasar más días en la clínica, pero era peligroso dejarlo ir inmediatamente.
El pasado mes de junio el mismo facultativo reconoció en un programa de televisión que Maradona tenía “algunos ansiolíticos recetados ya desde hace bastante tiempo”.
El galeno confirmó que todos los familiares del campeón del mundo de 1986 están de acuerdo con el tratamiento. “El objetivo principal es la mejoría de Diego. Todos empezamos a tirar para el mismo lado", dijo Luque hace una semana.
Y un día pasó lo que tenía que pasar, empezó Clarín. Diego ha muerto.