Jonathan Borja ya es historia en Cruz Azul. La semana pasada desde el club se despidió al jugador a través de las redes sociales después de que no hicieran válida la opción de compra que pesaba en la cesión de un año que culminó este mes de diciembre. El artillero volverá a las filas de la Liga Universitaria de Quito, en Ecuador, pero su futuro podría estar en la segunda división.
Y es que el nacido en Ibarra pertenece a la Liga Universitaria, pero su última experiencia en el país suramericano fue en las filas de El Nacional, equipo que acaba de descender a la segunda división del futbol ecuatoriano después de 41 años en el máximo circuito del balompié de ese país.
Antes de su arribo con Cruz Azul, Borja jugó con el llamado 'Chivas' de Ecuador -El Nacional solo admite en su equipo a futbolistas ecuatorianos- por dos temporadas, por lo que se generó un fuerte vínculo entre el jugador y la institución.
Desde LUQ no se han pronunciado por el futuro de un jugador al que han cedido en más de una ocasión. Y es que una de las razones de la salida de Borja del conjunto cementero se debió a un problema de actitud, mismo que se repitió en reiteradas ocasiones mientras jugaba en la liga del país del centro del mundo.
Con apenas 27 años de edad, Borja ha pasado por 13 equipos distintos, lo que habla del poco nivel de adaptación de un jugador al que no se le discuten sus cualidades técnicas, sino más bien sus 'salidas de tono' tanto dentro como fuera del engramado. "No me importa nada", llegó a decir en un entrenamiento de Cruz Azul. ¿Le importará ahora jugar en segunda división?